A
oscuras, yace sentado en un frío rincón, de cuclillas, como le obligan a estar…
no hay más que pensar, nada más que sentir, que la soledad abrazándolo. Algo
enciende la luz, algo llama su atención, se levanta inquieto, desesperado por
librarse de esa cárcel. Grita, golpea con fuerza las paredes, que poco a poco
ceden llevándose ese frío y esa soledad.
Las
paredes se agrietan, saca el brazo y con toda la fuerza que tiene agarra algo,
le grita, le suplica que se levante, que camine, que no lo deje solo, pues solo
desea que le dé una oportunidad más, no ha acabado todo…
Abro
los ojos, estoy en mi habitación, sentado en mi cama… siento escalofríos, dolor
en el pecho… no puedo evitar soltar una lágrima, que se precipita a la
alfombra, tragándola y haciendo parecer que no ha pasado nada, que no siento
nada. Como todo lo que pasa a mí alrededor, todo se lo traga el tiempo, nada queda
descubierto, todo aparenta estar acabado… Apago la luz, me quedo a solas con
mis pensamientos.
Algo
me golpea el pecho, oigo gritar, respirar… otra vez este corazón, me está
pidiendo que me levante, que deje de llorar… cada vez noto más el calor en mi
pecho, los golpes constantes se hacen más fuertes, más dolorosos.
Soy
idiota… le volveré a hacer caso, volveré a levantarme y a mirar alto, aunque
vuelva a caer él siempre me obliga a levantarme, siempre me da la mano…
"Caeré todas las veces que haga falta, he aprendido a levantarme mas rápido de lo que caigo"
Categories:
Melancolía,
Noches sin dormir
Me identifico mucho con este texto..saludos ^^
De verdad? vaya, gracias ^^
RESILENCIA....la dura escuela de la vida....esa que al fin y al cabo...nos hace ser quién somos...infinitamente especiales, únicos e irrepetibles...
SiraSweet